En aquellos días,
María se encaminó presurosa
a un pueblo de las montañas de Judea,
y entrando en la casa de Zacarías, saludó a Isabel.
En cuanto ésta oyó el saludo de María,
la creatura saltó en su seno.
Entonces Isabel quedó llena del Espíritu Santo,
y levantando la voz exclamó:
"¡Bendita tú eres entre todas las mujeres
y bendito es el fruto de tu vientre!
¿Quién soy yo para que La Madre de Mi Señor
venga a verme?
Apenas llegó tu saludo a mis oídos,
y el niño saltó de gozo en mi seno.
Dichosa eres tú, porque has creído
que se cumplirá todo cuanto te fue anunciado
de parte del Señor.
Lucas 1, 39-48
El Señor dijo a mi Señor:
Siéntate a mi diestra,
Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies
Salmo 110,1
Reinos de la tierra, cantad a Dios,
Cantad al Señor.
Salmo 68,32
Señor, abre mis labios,
Y mi boca publicará tu alabanza.
Salmo 51,15
Pero en cuanto a mí,
el acercarme a Dios es el bien;
He puesto en Jehová el Señor
toda mi esperanza
Salmo 73,28
Porque tú, oh Señor, eres bueno y perdonador,
Y grande en misericordia para con todos los que te invocan.
Salmo 86,5
Mas tú, oh Señor,
Dios misericordioso y clemente,
Lento para la ira, y grande en misericordia y verdad
Salmo 86,15
El Señor dijo a mi Señor:
Siéntate a mi diestra,
Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies
Salmo 110,1
El mismo David dijo por el Espíritu Santo:
Dijo el Señor a mi Señor:
Siéntate a mi diestra,
Hasta que ponga tus enemigos por estrado de tus pies.
Marcos 12,36
David no subió a los cielos; pero él mismo dice:
Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi diestra,
Hechos 2,34
============================================
escrito está:
Vivo yo, dice el Señor,
que ante mí se doblará toda rodilla,
Y toda lengua confesará a Dios.
Romanos 14,11
Para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla
de los que están en los cielos,
y en la tierra, y debajo de la tierra;
y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor
Filipenses 2,10-11
En aquellos días,
María se encaminó presurosa
a un pueblo de las montañas de Judea,
y entrando en la casa de Zacarías, saludó a Isabel.
En cuanto ésta oyó el saludo de María,
la creatura saltó en su seno.
Entonces Isabel quedó llena del Espíritu Santo,
y levantando la voz exclamó:
"¡Bendita tú eres entre todas las mujeres
y bendito es el fruto de tu vientre!
¿Quién soy yo para que La Madre de Mi Señor
venga a verme?
Apenas llegó tu saludo a mis oídos,
y el niño saltó de gozo en mi seno.
Dichosa eres tú, porque has creído
que se cumplirá todo cuanto te fue anunciado
de parte del Señor.
Lucas 1, 39-48
Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡
Señor mío, y Dios mío!
Juan 28,28
María se encaminó presurosa
a un pueblo de las montañas de Judea,
y entrando en la casa de Zacarías, saludó a Isabel.
En cuanto ésta oyó el saludo de María,
la creatura saltó en su seno.
Entonces Isabel quedó llena del Espíritu Santo,
y levantando la voz exclamó:
"¡Bendita tú eres entre todas las mujeres
y bendito es el fruto de tu vientre!
¿Quién soy yo para que La Madre de Mi Señor
venga a verme?
Apenas llegó tu saludo a mis oídos,
y el niño saltó de gozo en mi seno.
Dichosa eres tú, porque has creído
que se cumplirá todo cuanto te fue anunciado
de parte del Señor.
Lucas 1, 39-48
El Señor dijo a mi Señor:
Siéntate a mi diestra,
Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies
Salmo 110,1
Reinos de la tierra, cantad a Dios,
Cantad al Señor.
Salmo 68,32
Señor, abre mis labios,
Y mi boca publicará tu alabanza.
Salmo 51,15
Pero en cuanto a mí,
el acercarme a Dios es el bien;
He puesto en Jehová el Señor
toda mi esperanza
Salmo 73,28
Porque tú, oh Señor, eres bueno y perdonador,
Y grande en misericordia para con todos los que te invocan.
Salmo 86,5
Mas tú, oh Señor,
Dios misericordioso y clemente,
Lento para la ira, y grande en misericordia y verdad
Salmo 86,15
El Señor dijo a mi Señor:
Siéntate a mi diestra,
Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies
Salmo 110,1
El mismo David dijo por el Espíritu Santo:
Dijo el Señor a mi Señor:
Siéntate a mi diestra,
Hasta que ponga tus enemigos por estrado de tus pies.
Marcos 12,36
David no subió a los cielos; pero él mismo dice:
Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi diestra,
Hechos 2,34
============================================
escrito está:
Vivo yo, dice el Señor,
que ante mí se doblará toda rodilla,
Y toda lengua confesará a Dios.
Romanos 14,11
Para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla
de los que están en los cielos,
y en la tierra, y debajo de la tierra;
y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor
Filipenses 2,10-11
En aquellos días,
María se encaminó presurosa
a un pueblo de las montañas de Judea,
y entrando en la casa de Zacarías, saludó a Isabel.
En cuanto ésta oyó el saludo de María,
la creatura saltó en su seno.
Entonces Isabel quedó llena del Espíritu Santo,
y levantando la voz exclamó:
"¡Bendita tú eres entre todas las mujeres
y bendito es el fruto de tu vientre!
¿Quién soy yo para que La Madre de Mi Señor
venga a verme?
Apenas llegó tu saludo a mis oídos,
y el niño saltó de gozo en mi seno.
Dichosa eres tú, porque has creído
que se cumplirá todo cuanto te fue anunciado
de parte del Señor.
Lucas 1, 39-48
Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡
Señor mío, y Dios mío!
Juan 28,28